La Presidenta llamó a “admitir al otro, a la forma de vivir, rezar y organizarse diferente”. Y remarcó que la “intolerancia revela mediocridad”. Además, transmitió el enojo de la vicepresidenta de España, María Teresa Fernández de la Vega, por las falsas informaciones sobre Aerolíneas y subrayó que “nunca antes la Argentina tuvo lazos tan profundos" con ese país.
La presidenta Fernández de Kirchner también se refirió a la discriminación hacia la mujer y lo graficó con cifras a las que calificó de "escandalosas".
Dijo que el 70 por ciento de la población no escolarizada infantil del mundo son niñas y que dos terceras partes de los 960 millones de adultos que no saben leer son mujeres y que tres quintas partes de los 1.000 millones de pobres del mundo también pertenecen al género femenino.
Pero aclaró que esta discriminación "no sólo se da a este nivel sino también cuando la mujer ocupa un lugar en el sistema de poder" y citó el caso de la política europea que recibió fuertes críticas de la prensa del Viejo Continente por haber lucido un escote.
"El otro día me tocaba ver como se escandalizaba la prensa por el escote que llevaba una política europea, y sin embargo nadie se escandalizó nunca por la calvicie de un político", dijo al tiempo que calificó la actitud hacia la funcionaria de "mediocre".
Asumió en este marco que "puede haber pueblos o sociedades que no quieran vivir según las formas" que proclama Occidente como de "carácter universal o uniforme, con democracias en la que existe la división de poderes y en la que la religión está separada del Estado", y planteó como desafío "respetar" las formas de organización diferentes.
"Es un desafío a la inteligencia el hecho de entender que puede haber sociedades, culturas y pueblos que elijan otras formas de relacionarse, de vivir y, fundamentalmente, de organizarse.
Nosotros deberíamos respetar esas formas diferentes a la nuestra"