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SL Enterprise

SL Enterprise no es más que un servidor de regiones, con capacidad para mantener ocho de estas en activo simultáneamente, alojando hasta 800 avatares correspondientes a otros tantos usuarios conectados. Se instala en los servidores del mismo cliente, lo gestiona su propio personal, y permite las mismas funcionalidades que el Second Life público (es de imaginar que con el mismo cliente, aunque modificado para que permita seleccionar servidor al que conectarse): construir, comunicarse (ya sea por voz o chat de texto), y definir reglas para interactuar con los diversos elementos presentes en el mundo.


Second Life

Pese a ejecutarse de forma autónoma y no depender de los servicios en línea proporcionados por Linden Lab para el resto de los usuarios “normales” (léase, el Second Life al que puede acceder cualquier internauta), existe la posibilidad de exportar elementos creados en el Second Life público al entorno empresarial privado, incluso gestionando derechos de propiedad intelectual o otorgándoselos a terceros.

La nueva herramienta no es gratuita ni tampoco barata: una licencia puede llegar a costar hasta 55.000. Solamente mencionar que entre los actuales clientes de Linden Lab encontramos a empresas de la talla de IBM, Northrop Grumman (fabricantes de aviones de combate para el ejército de los Estados Unidos, como el famoso F14 del film Top Gun) o Intel, ya nos podemos imaginar que constituye un sistema de alto coste.

La utilidad de este sistema y otros similares se encuentra en las reuniones virtuales mediante avatares y el trabajo en grupo, que ahorran costes de desplazamiento y estancias a las empresas. Naturalmente, no es solo útil para reuniones (el aspecto para el que tal vez tiene menos sentido), sino para trabajar en tiempo real sobre modelos tridimensionales, interactuando con ellos como en la vida real.

Por ejemplo, imaginemos un bufete de arquitectura que tiene sedes en diversos sitios del mundo, y en el que se lleva a cabo el proyecto de un edificio en Nueva York. Desde Barcelona o Tokio, otros arquitectos pueden conectarse al mundo virtual, recorrer el edificio en construcción, aportar sus ideas y discutir con los arquitectos neoyorquinos los diversos cambios que pueden hacerse al diseño. Todo ello sin tener que moverse de la butaca de su oficina o, incluso, desde su propio domicilio conectándose al servidor mediante una VPN (Red Privada Virtual por sus siglas en inglés).

El nivel de integración con la infraestructura de la empresa es tal, que los usuarios pueden acceder al mundo virtual privado con sus nombres reales, mediante la integración con el directorio LDAP que puede llevarse a cabo. Los administradores del sistema podrán controlar todos los parámetros de SL Enterprise gracias a una consola web que puede manejarse desde cualquier navegador.

Para complementar su entorno empresarial, Linden Lab ha lanzado también SL Work Marketplace, una especie de mercado online de elementos virtuales y regiones enteras dirigido a las necesidades empresariales. Parece beber directamente de las tiendas de aplicaciones que se están poniendo de moda desde la irrupción de la App Store de Apple, pero obviamente esta es mucho más concreta y focalizada. Entre los elementos que podremos encontrar en esta tienda se encuentran regiones enteras con objetivos concretos, como salas de reuniones o de simulación, así como su contenido asociado, herramientas de colaboración, avatares y mucho más.

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